23 de octubre de 1955, una fecha que marcó para siempre la historia del Deportivo Independiente Medellín. Ese día, el “Poderoso de la Montaña” se consagró campeón por primera vez en el fútbol profesional colombiano, dando inicio a una historia de gloria, pasión y amor por los colores rojo y azul.
El equipo consiguió el título tras una campaña brillante: ganó 21 compromisos, empató 2 y solo perdió 4, con un total de 69 goles a favor y 23 en contra, siendo la valla menos vencida del campeonato. De 54 puntos posibles, el Medellín sumó 44, en una época en la que la victoria otorgaba 2 puntos, no 3 como en la actualidad.
Los encargados de forjar esa primera estrella fueron: Efraín “Caimán” Sánchez, Fernando Sierra, Hernando Caicedo, Jorge Méndez, Francisco Pacheco, Valerio Delatour, Marcos Col Tara, Carlos Arango M., Iván Benítez, Lauro Rodríguez (uruguayo), Lorenzo Calonga (paraguayo), José Manuel Moreno, Lídoro Soria, Pedro Retamoso, Orlando Larraz, Felipe Marino y René Seghini (argentinos).
El principal gestor de ese título fue José Manuel Moreno, figura histórica del fútbol mundial, quien además de brillar en el campo, actuó simultáneamente como jugador y director técnico del equipo, liderando con talento, jerarquía y visión a un grupo que hizo historia.
Bajo su conducción, el DIM mostró un fútbol ofensivo, sólido y elegante, conquistando el corazón de una ciudad que empezaba a sentir el orgullo de tener un club grande, con identidad y con una hinchada fiel.
Hoy, 70 años después, recordamos aquel logro con la misma emoción y orgullo. Fue el inicio de una historia que se ha construido con esfuerzo, pasión y el inquebrantable apoyo de la Familia Poderosa, que sigue alentando generación tras generación.
Ese primer título no solo marcó un antes y un después en la historia del Medellín, sino que sembró el espíritu competitivo que nos acompaña hasta hoy.
¡Hace 70 años nació el Poderoso campeón!
