El Equipo de David sumó un punto fuera de casa y aún no conoce la derrota.
Este jueves, el Rojo de Antioquia visitó al Deportivo Cali en el estadio de Palmaseca por la tercera fecha del rentado nacional. Un partido marcado por la rivalidad de ambas escuadras, técnicos renovados y propuestas nuevas, prometía un juego lleno de emociones.
El Medellín, fiel a su propuesta, trató de hacer daño juntando hombres en campo contrario con la intención de jugar a un toque y romper líneas. Así llegó el primero del Poderoso, Ricaurte inició una serie de pases que desencadenaron en un tiro de esquina ejecutado magistralmente como lo dictan los cánones del fútbol. Pelota al centro del área, anticipación y definición excelsa de cabeza. De esta manera, Arregui pintó la primera joya de la noche al minuto 20.
El DIM, después del gol, cedió un poco la posesión del balón, invitando a su rival a que lo atacara, y hasta segunda mitad, el Rojo no sufría el partido. Sin embargo, el Deportivo Cali movió el equipo para la segunda parte y empezó a complicar al Poderoso a través del juego aéreo. Una mano en el área de Arboleda, desencadenó en el empate azucarero. Al minuto 81, se empató el partido y el local se llenó de confianza para buscar el triunfo.
Por la misma vía llegó el segundo del Verde del Valle, cobro de esquina donde superaron nuevamente la saga rival y dejaron a Marmolejo sin posibilidades. Minuto 85 y al Decano le quedaba poco tiempo para salvar el partido. Diez minutos después, un penalti sobre Felipe Pardo revivió las esperanzas del equipo paisa. Última jugada del partido, la tribuna en contra y una responsabilidad enorme sobre la espalda, pedían al mejor ejecutor. Christian Camilo Marrugo, tomó la pelota mostrando su liderazgo, los láser y los silbidos desde el arco sur trataban de intimidarlo y el ídolo, de manera descarada, picó la pelota que se fue en cámara lenta al fondo de la red. ¡Qué frialdad Christian Camilo!
El Decano se trajo un valioso empate desde la ciudad de Cali que lo mantiene invicto y con toda la fe de su hinchada. Nos vemos el Domingo en el Atanasio ¡Vamos Rojo querido!