Por: Jose David Chalarca Suescum
Los dirigidos por David Montoya enfrentaron un partido clave contra una de las filiales de River Plate para avanzar algunos puestos en la tabla de reclasificación.
Con la intención de ganar, el equipo rojo salió al campo con un 4-1-2-3: en el arco, Tomás Callejas; en la primera línea, Kevin Corrales, “Juan Manuel”, Andrés Murillo, Manuel Torres; en la línea de marca, Andrés Vásquez y Miguel Ruiz; más adelante, Moisés Cuartas, Alejandro Molina y Steven Cruz; y en punta, Pablo Galeano.
La idea de Montoya era disponer un equipo muy ofensivo, en donde el volante Miguel Ruiz acompañara en la marca a Andrés Vásquez, pero también pudiera apoyar el ataque. Asimismo, planteó un equipo con Galeano jugando de falso “9” para acompañar a los volantes y correr por todo el frente.
Una vez el balón rodó en la Marte 1, River Plate se adueñó de las primeras acciones y probó de media distancia, mientras en el DIM se juntaron de manera esporádica Ruiz, Molina y Cuartas. Con el pasar de los minutos, el equipo ‘millonario’ adelantó sus líneas y aprovechó algunas imprecisiones en los pases del rojo. Así llegó el primero para el conjunto blanco, de cabeza al 39’ y así transcurrió el resto primer tiempo.
En la etapa complementaria, Montoya realizó variantes para revertir la situación: entró Anderson Salazar, Jackson Álvarez y Alejandro “la Roca” Restrepo por Pablo Galeano, Andrés Vásquez y Manuel Torres.
Aunque el equipo rojo aún tenía imprecisiones y falta de consistencia, los volantes lograron filtrar algunos pases entre la defensa de River, lo que derivó en buenos desbordes para sus laterales y su delantero. Sin embargo, el equipo blanco logró convertir el 2-0, a través de la misma fórmula del primero.
Montoya intentó corregir nuevamente al equipo con más variantes: salieron Alejandro Molina y Moisés Cuartas por Juan David Calvo y Daniel Bolívar. Además de ello, mandó al extremo Stiven Cruz a jugar en el medio, dejándole la banda derecha a Calvo, y acomodó a Bolívar en el otro lado de la cancha.
El equipo mejoró notablemente en actitud y disposición. Una vez se conectaron los nuevos jugadores del rojo, logrando más pases seguidos con los laterales, llegaron los goles. Uno de los volantes filtró un balón para “la Roca”, quien desbordó por derecha y encontró a Anderson en el centro del área. El delantero fue derribado y esto derivó en un penal para el DIM, que el mismo atacante definió con un remate potente a la mitad del arco, alrededor del 75’.
El conjunto rojo y azul empujó aún más a su rival contra la portería, gracias a la entrada de Maicol Mira, quien desbordó de manera continua por la banda derecha y logró conectar pases importantes durante el resto del segundo tiempo.
Finalmente, con más corazón que juego, los dirigidos por David Montoya forzaron el empate con un autogol del equipo ‘millonario’, a pocos minutos del cierre.
No todo terminó ahí, pues con el último resto físico que les quedaba a los jugadores, Independiente Medellín anotó el 3-2 definitivo, luego de un rebote que cazó Juan David Calvo en el límite del área, tras el buen desmarque y remate de Maicol contra el arquero, y que este definió de volea.
Aunque, en palabras del propio David Montoya, no fue el mejor partido de sus dirigidos, el equipo rojo aún tiene mucho para aportar y para estar en los primeros puestos de la reclasificación en la Primera C.
