El Decano dejó pasar una oportunidad de oro en su casa y ahora le toca esperar por un milagro.
Por la quinta fecha del cuadrangular B se jugó en el Atanasio Girardot, quizá el encuentro más llamativo del grupo; un Tolima decidido a arrebatarle el liderato al Poderoso y por otro lado, el DIM con la ilusión de clasificarse anticipadamente… se vaticinaba un duelo memorable.
La intensidad de ambas escuadras marcaban el ritmo del partido, desde el minuto 4 Tolima ya inquietaba a Marmolejo y lo hacía con peligro. El rumbo del juego cambió cuando los “Pijaos” se quedaron con un hombre menos. Al minuto 29′ Fabián Mosquera abandonó el partido después de una dura entrada a la rodilla de Jean Pineda.
Sin embargo, el equipo tolimense no arrugó y después de 29 toques, puso el único y definitivo gol del partido en los pies de Anderson Plata.
El DIM por su parte no aprovechó el hombre de más en el campo, las variantes del profe Julio nunca fueron reactivas y el equipo Rojo se veía más impotente con el pasar de los minutos, hecho que se agudizó con la expulsión de Luciano Pons.
Un Medellín remando con más ganas que ideas y una derrota que acabó con el invicto de 33 fechas en casa y además, lo dejó agonizando a la espera de un milagro: ganarle a Equidad en Bogotá y esperar una victoria del cuadro naranja en condición de visita.