Hoy juega el Poderoso |
La representación de nuestra felicidad está plasmada en la cantidad de sonrisas que nos puede sacar un resultado a favor, el sentido de lo redondo que combatimos todas las jornadas es el motor de la rebeldía que nos implica a siempre ir hacia adelante. Esta ruleta no para, lo que hay que hacer es seguir firmes.
El tiempo es un impostor, pero si se le da lo que quiere, es un tipo que te consigue cosas buenas. 500 escalones o el cielo a doce pasos, mi voz en tus tablones no entiende de fracasos. Qué semanita nos espera, la clave es no desenfocarse.
El viento viejo nos cuenta coplas, nos relata lo que próceres de otrora hicieron para que estemos acá. De la tierra emerge una enseñanza: ser eternos con nuestras armas.
Vamos, Poderoso; por muchas alegrías.